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Hace tiempo leí en una revista que nacemos solos, y morimos solos.

Me pareció una afirmación muy triste, pero cierta. Aunque con el paso del tiempo he encontrado otro significado un poco más optimista a esa afirmación.

Es cierto, nacemos y morimos solos, pero lo que cuenta no es el momento del nacimiento o de la muerte en si, sino todo lo ocurrido entre esos dos momentos.

Es como una película... todo lo importante pasa desde el anuncio del león rugiendo, hasta que empiezan a salir los créditos del final.... Es lo que cuenta.
Por eso, pienso que por mucho que nazcamos y muramos solos, a lo largo de la vida NUNCA lo estamos.
Siempre va a haber al menos una persona a la que le importes, SIEMPRE.
Ya sea un familiar, un amigo, una pareja... o todos!! SIEMPRE HAY ALGUIEN.
También es verdad que muchas veces aunque estés rodeado de gente no puedes evitar sentirte solo, pero igual que ese sentimiento surge rápidamente de la nada, puede desaparecer con la misma rapidez.
Simplemente piensa en tu familia, tus amigos, tus compañeros de trabajo, tu pareja, o en esa abuelita amable que te ha dejado pasar en la cola del súper, o en ese niño al que has sacado la lengua en el parque y te ha sonreído.

El mundo está lleno de gente. Algunos pasan por tu vida sin dejar rastro, otros pasan dejándolo todo patas arriba cuando se van. Y otros llegan para quedarse. La única persona que siempre va a estar ahi, vas a ser tú!
La única forma de no sentirse nunca solo es aprender a disfrutar de la soledad.

Aunque como iba diciendo, empiezo a no creer en la soledad como concepto.
Igual estoy pecando de optimista pero quiero pensar que siempre hay, al menos, una persona a la que le importas en este mundo... y si sabes de sobra que esa persona existe, o, mejor aún, que no es solo una, sino muchas... ¿Para qué sentirte solo?
Es como el dicho ese de: "si tiene solución, ¿para qué preocuparse? y si no la tiene, ¿para qué preocuparse?"

Todo esto viene porque hoy me apetecía dedicarle el blog a 2 personas que para mí son muy importantes.

Una de ellas llegó a mi vida hace unos 9 meses (mira, como un embarazo xD) y se ha convertido en alguien a quien quiero muchísimo. El nivel de complicidad que tengo con esta persona es impresionante. Y lo que le admiro, también.
Es una persona noble, valiente, con un gran sentido del humor y un aún más grande corazón.
Y ya no es solo la complicidad o todo lo que tenemos en común lo que nos une, sinó el nivel de empatía, y el hecho de que nos están pasando casi las mismas cosas, y a la vez...
Y en estos 9 meses me ha demostrado y dado más que mucha gente a lo largo de toda mi vida.

La otra persona hace ya más de 7 años que la conozco. Decir que es mi mejor amiga se queda corto, ya directamente decimos que somos como hermanas. La cantidad de aventuras que hemos pasado juntas no se pueden contar por aquí, me faltarían blogs en el mundo para ello, igual que me faltarían blogs en el mundo para decir lo que le quiero. Pero sin embargo, aquí seguimos 7 años después, añadiendo vivencias a nuestros diarios, y lo más importante, es que en esas vivencias estamos juntas.
Ella está como una verdadera cabra, y sea cual sea el tornillo que le falta, es el mismo que me falta a mi. 

Con ella también la complicidad y el "bluetooth mode activated" es algo impresionante, hasta el punto de llegar a pensar lo mismo y entendernos solo con mirarnos.

El caso es que hoy quería dedicar esta entrada de mi blog a ellas dos... a Eva y a Nur. Mis dos grandes apoyos, sobre todo en los últimos meses.
Porque han pasado mil y una cosas, a cada una de nosotras, y las hemos ido sobrellevando como hemos podido, y hemos peleado, y hemos salido adelante... pero no solas.
Y el tener a alguien es siempre importante, pero si ese alguien encima está en tu misma situación, en el mismo país, rodeado de la misma gente rara, con la familia y los amigos lejos...  os aseguro que sea lo que sea que vivais juntos, os acabará uniendo, y esos lazos invisibles, si se cuidan, pueden durar toda la vida.

Así que hoy va por vosotras... Por todo lo que hemos vivido, y por todo lo que nos queda. Por todas las lágrimas que hemos llorado juntas, y por todas esas risas que nos hemos echado, que por suerte, superan con creces a las lágrimas.
Porque os quiero dar las gracias por ser como sois, y porque con vosotras soy yo misma en todo momento. Y porque os quiero, y punto.

Un besazo, perris!!